ANTICIPOS/ Empresas y personas físicas se apresuran a repartir dividendos “a cuenta de 2020” para evitar el gravamen del 5% en Sociedades que imponen los Presupuestos de 2021, y el alza del ahorro al 26%, que sufrirán las personas físicas.

 

Muchas empresas apuran los días para anticipar el reparto de dividendos y la venta de participaciones con el fin de sortear el hachazo fiscal que viene con las subidas de los Presupuestos de 2021. Empresas cotizadas y no cotizadas se apresuran a repartir dividendos “a cuenta de 2020” con el fin de evitar el gravamen del 5% en Sociedades que imponen socialistas y morados, y el alza de tres puntos de los tipos del ahorro, al 26%, que sufrirán las personas físicas. La subida de las rentas del capital también lleva a anticipar a los últimos días del año el cobro de bonus y otros productos.

En lo que respecta al dividendo, se prevé un gravamen del 5%, o si se prefiere, se limita al 95% la exención respecto de dividendos y plusvalías obtenidos por entidades residentes y no residentes. Es el alza que más inquieta, que de entrada supone una doble imposición porque estos dividendos ya han tributado en Sociedades en España o en el extranjero, y que además se acompaña de un temido efecto cascada, por el que en una estructura de ocho sociedades, por ejemplo, el tipo del impuesto se multiplica por 8.

En las rentas del ahorro, los contribuyentes que reciban dividendos con ganancias desde 200.000 euros pagarán un 26%, en lugar del 23% ahora vigente para rendimiento desde 50.000 euros.

Ayudas por ERTE

Está habiendo mucho reparto de dividendos contra reservas pero hay que tener en cuenta que no pueden ser de ejercicios en que se hayan recibido ayudas por ERTE. Igualmente se suman reestructuraciones de grupos para evitar el efecto cascada, alguna operación para generar exenciones en transmisiones de sociedades, ventas entre grupos y aportaciones.