El Consejo de Ministros aprobó ayer dos nuevas medidas de reforma de las pensiones: Un nuevo incentivo para retrasar voluntariamente la edad de jubilación y la reducción del periodo de cotización exigido para poder cobrar la pensión a las personas con, al menos, un 45% de discapacidad.

 

Respecto a la primera medida, esta consiste en un nuevo incentivo para retrasar voluntariamente la jubilación efectiva más allá de la edad legal. Este año está en 65 años, con 37 años y nueve meses, y en 66 años y cuatro meses con menos tiempo de cotización. En 2027 la edad legal de jubilación se situará en 67 años.

En este contexto, el Gobierno aprobó ayer el reglamento que regula un nuevo incentivo para retrasar la jubilación. Consiste en hacer posible una combinación de los dos estímulos previstos hasta ahora. Es decir, que una persona pueda cobrar una prima única por cada año de retraso en la jubilación, más un incremento adicional de la cuantía de la pensión también por año de retraso.

Por ejemplo, quienes opten por retrasar su jubilación entre dos y diez años recibirán simultáneamente un aumento de su pensión del 2% por cada año de retraso. Además, tendrá un pago único equivalente a la mitad que le correspondería si hubiera optado sólo por la prima única.

La segunda medida importante que el Consejo de Ministros aprobó ayer es la reducción de 15 a 5 años del periodo de cotización exigido para poder cobrar el 50% de la pensión a todas las personas que acrediten, al menos, tener un 45% de discapacidad. Incluso, estas personas podrán sumar diversas patologías que padezcan para llegar al 45% de la discapacidad.

 

Dpto. Laboral Qualitax Abogados & Consultores