Negociación del Gobierno con las organizaciones de autónomos con el fin de mejorar sus pensiones de jubilación.
El Gobierno está negociando con las organizaciones de autónomos que, a partir de los 47 años, estos empresarios y trabajadores puedan elevar libremente sus bases de cotización a la Seguridad Social, con el fin de mejorar su pensión de jubilación.
El objeto de la negociación es el de eliminar los topes que actualmente tienen ahora muchos autónomos a partir de 47 años para poder incrementar su cotización en los últimos años de su vida laboral. La limitación de la cotización máxima de los autónomos se estableció por parte de la Seguridad Social para evitar el incremento de sus pensiones al cotizar los últimos años por las bases más altas de la Seguridad Social, después de haber cotizado el resto de su vida laboral por la base mínima. Para ello también se incrementó el periodo de cálculo de las pensiones, que ya está en los 25 años.
Con la nueva propuesta de cotización según los ingresos que ha hecho el Gobierno a los autónomos, cambia este escenario, dado que se obligará a los autónomos a cotizar en función de sus ingresos, superando los límites establecidos anteriormente. La propuesta tiene trece tramos de aportación, en un periodo comprendido desde 2023 a 2031, con una horquilla de ingresos establecida entre los 600 y los 4.050 euros al mes. Las cotizaciones se mantienen estables o bajan al final del periodo transitorio, para todos aquellos que ingresan hasta 1.300 euros al mes. A partir de ese nivel de ingresos, la cotización se incrementa de forma porcentual hasta llegar a una cuantía máxima de 1.266,66 euros al mes de cotización, para quienes ganen más de 4.050 euros al mes. Los autónomos podrán cambiar de bases de cotización hasta seis veces al año, en función de sus ingresos.
El problema de esta flexibilidad en la elección de bases superiores a partir de los 47 años, va de la mano de la rigidez que se establece por la obligatoriedad de cotizar por el nivel de ingresos, sin tener en consideración otros aspectos como las cargas empresariales y personales, o el beneficio real de actividad del autónomo.